miércoles, 24 de diciembre de 2008

Un saludo.

Hola a todos, rapidito me dejo caer acá sólo para elaborar un nano-saludo de navidad para todos ustedes. Aprovecharé la ocasión para agradecer a quienes leen este espacio porque lo mantienen con la poca vida que tiene. Espero eventualmente retomar mis escritos largos y tediosos porque en parte los echo de menos. Pero ahora sólo quería concentrarme en agradecer por este año que se va, donde recibí muchos regalos (con el advenimiento del simbolismo de los regalos que se viene esta noche) intangibles, y supe hacer corazones de muchas tripas tiradas por los suelos.

Quiero agradecer a la vida, quien me ha levantado, me ha cacheteado, pero no me ha matado, por lo que he podido continuar en mi camino. Quiero agradecer a mi familia porque me han enseñado a valérmelas por mí mismo, y a mis amigos porque cuando me ha costado hacerlo ellos han estado allí. Quiero agradecer también a la gente que conocí hace muy poco gracias a todo lo del mundial femenino, espero llegar a conocerlos mejor y a seguir saliendo y trabajando con ustedes. Y finalmente quiero agradecer a la suerte, que ha sido un poco más benevolente con esta persona que hasta hace muy poco se quejaba de la suya.

Les deseo una feliz navidad a todos los que han pasado, pasan o pasarán por este lugar y por mi vida. Espero que ustedes puedan llegar a agradecer igualmente mi paso por sus vidas, de la manera que sea. ¡Se viene el 2009, otra oportunidad para hacer lo que queramos! ¡A disfrutar!

sábado, 6 de diciembre de 2008

La Víspera.


Hoy es un día especial. Es la víspera de la final del mundial Femenino Sub-20 y tengo sentimientos encontrados. Por una parte, estoy muy expectante debido a que es el día que todos los voluntarios del mundial hemos estado esperando, ya que el Estadio Municipal de La Florida estará lleno y viviremos una fiesta única. Pero por otro lado estoy un poco triste debido a que todo este mes cargado de fútbol y buenas experiencias llegará a su fin, y la vida volverá a como era antes: un poco unidimensional, si bien no fome, pero unidimensional.

Ahora me voy, pero sé que les debo una historia sobre todo esto. Después de todo, gran parte del tiempo que no estuve acá se lo dediqué a esta experiencia genial y que me ha ayudado en hartos ámbitos. Ahora debo trabajar para un examen, pero después se viene la fiesta.

Hasta pronto.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Teletón 2008


Hola, espero que estén muy bien. Yo estoy bastante bien. Sólo me dejo caer por acá unos minutos para hablar de esta nueva Teletón, versión 2008. No voy a volver a repetir todo lo que dije en el tema del año pasado sobre esta noble causa y todo eso (sí, y también la parte del negocio y la injusticia con las otras causas). Quiero hablar esta vez de lo excesiva que me ha parecido su campaña publicitaria, y lo poco motivado que me siento este año a seguir la transmisión.

Sé que estamos en período de crisis económica, y que la gente es muy buena buscando pretextos para no hacer alguna cosa, pero creo que las cabezas que decidieron tomar las riendas de la publicidad de la Teletón realmente se fueron a un extremo. A mí me terminaron pateando todos los intentos de recordarnos amigablemente que tenemos una cita con el bien el 28 y el 29 de noviembre. Si bien encontré interesante que hayan puesto nombres y caras en las calles de Santiago, porque así el aporte se hace personal: "yo estoy ayudando para que Marito Cárcamo se rehabilite, yo, YO, a él"; todo lo que se hizo en televisión me cargó.

A pesar que yo veo muy poca televisión, los vi en todas partes (me imagino cómo debió ser para un adicto a la caja idiota). Como si fuera muy poco ver comerciales de las marcas auspiciadoras todos los benditos días, en muchos programas se hablaba de la causa y de las 27 horas de amor, todos los rostros andaban con el corazoncito en sus trajes, y en todos los noticieros vivían momentos de alegría al realizar la cuenta atrás. Pero ya lo absolutamente peor, y algo que me pateó pero en demasía (casi una 'patá eterna' xD) fue ver casi un capítulo entero de 'Los 80' que prácticamente giró alrededor del programa. Yo ya decía que perfectamente el capítulo podría haberse llamado 'Teletón'.

Lamentablemente, todo lo anterior logró algo negativo: por mi parte ya no estoy muy interesado en seguir la transmisión, como lo hacía en años anteriores, y sólo atinaré a donar mi plata calladito, tratando de hacerlo tarde esta misma noche. Tampoco quiero filas eternas en bancos calurosos.

Yo creo que los chilenos sabemos que tenemos un compromiso con esta causa, que ya no hay forma que la Teletón pase desapercibida, porque todos la queremos y la apreciamos como parte de nuestra idiosincracia, y somos felices (y nos sentimos mejores personas también, eso es obvio) al aportar unas chauchas. No creo necesario que nos ahoguen con publicidad y que tantos rostros se paseen para ganar un poco más de notoriedad. Algo ya empieza a oler medio extraño acá.

¿Necesitará reinventarse esta cruzada? Les dejo la pregunta planteada. Yo creo que tiene muchos elementos que pueden mejorar, y hay que considerar qué va a pasar cuando Donald Francis se ponga el pijama de palo. Después de todo ya han pasado 30 años desde la primera Teletón, y no es que nos vayamos poniendo más jóvenes en el proceso.

Ya, sería todo. Opinen, cuídense y nos veremos por ahí. Chau.

PD: La vedetón me importa menos que partido de fútbol de la liga de Emiratos Árabes ^^

jueves, 27 de noviembre de 2008

Otro temita (aka ¡por las barbas del mono que ha pasado rápido el mes!)

Hola nuevamente, no quiero hacer de esto una rutina, pero a falta de tiempo vuelvo acá sólo para esto: dejaros un temita para que lo disfruten.

Les dejo el tercer video de los que se me ocurrió buscar. En primer lugar busqué el tema llamado New World del grupo DeVotchKa, pero no encontré un video original, así que next! Así llegué a Keep Yourself Warm del grupo Frightened Rabbit (qué onda los grupos estos días: Band Of Horses, The Weakerthans, Frightened Rabbit. Mi grupo se va a llamar CAZUELA, qué más bacán que eso (pobre del que lo copie!)), pero tampoco había nada bueno. Hasta que llegué al video número tres: el de Challengers del grupo (aquí vamos de nuevo) The New Pornographers. Bonito tema, encachado el video, me encanta la parte del beso (aparentemente no sólo a mí) y me gusta el vestido de la niña. Al parecer tengo una seria patología con las cosas con puntos.

Con eso me acuerdo de un chiste de Animaniacs en el capítulo de Yunquelandia (que ha inspirado grandes cosas), pero en inglés. Están hablando de esa ropa con Dot y para asegurarse le preguntan "polka Dot?", pero ella piensa que la están invitando a bailar polka, y en unos absurdos veinte segundos hay un baile. La talla se repite como tres veces, y es chistosa todas las veces, porque Dot se va cabreando a medida que la invitan a bailar. Acá hay un pedazo del episodio, pero pueden saltárselo si lo desean.



En fin, acá está el video principal, ojalá les guste.



Como dijo Arnol Josiney en Sherminator 1 y 2: "Volveré", y yo le añado algo más: "Luego". Cuídense harto, y si no entendieron la talla de Josiney, o bien la otra, no se preocupen, el que ríe último no es porque no haya entendido la talla, sino que porque ríe mejor. Ya lo verán.

Chau!

PD: Vean lo que queda del mundial femenino, está mejor de lo que cualquiera pudo haber imaginado, y yo tengo una buena imaginación.

jueves, 30 de octubre de 2008

Un temita

Hola a todos, como me he impuesto hacerlo, todos los meses estaré posteando alguna cosa. Por extrema falta de tiempo, acá sólo les dejo un tema, pero que me gusta mucho. Como estamos en primavera también uno anda un poco revolucionado ("my heart's in overdrive and you're behind the steering wheel") y por eso el tema suena aun mejor. Posee uno de los riffs más bacanes de la vida, y eso que no es tan difícil. Eso sí, el video es bien malo, lo sé.



Perdonen lo breve y lo extraviado, pero ya volveré en gloria y majestad :)
Disfruten. Chau!

martes, 9 de septiembre de 2008

Mundial Femenino FIFA Sub-20 Chile 2008


Hola a todos, pido disculpas por la demora en postear. Los días se están yendo muy rápido y las cosas están por cambiar. Sólo quería dejar una palabra sobre el mundial femenino de fútbol a celebrarse en... sí, Chile.

Mi amor por las juntas mundiales de fútbol me hizo pensar muchos días sobre el campeonato del mundo femenino a celebrarse en nuestro país del 19 de noviembre al 7 de diciembre. En realidad me costó darle crédito a esta junta, debido a que nunca vi a un país realmente comprometido con hacer bien el mundial; también pensaba que las mujeres jamás brindarán un espectáculo como el fútbol masculino; y además culpé al factor de la raza, o sea, que Chile vale hongo y que no será capaz de brindar un buen espectáculo.

Sin embargo, después de tanto pensar, puse en una balanza los posibles pros y los posibles contras de esta junta mundialista. Los contras (bastante subjetivos por lo demás) ya los sopesé, y me di cuenta que los pros, aunque no son extremadamente positivos, significan mucho para un país como el nuestro, que busca (sí, porque no lo es, quien lo piensa sáqueselo de la cabeza) el desarrollo en muchos ámbitos, como son en este caso el de la infraestructura y el deportivo.

En primer lugar tenemos la muy importante reconstrucción de los estadios Germán Becker de Temuco, Francisco Sánchez Rumoroso de Coquimbo, Nelson Oyarzún de Chillán y el Municipal de La Florida, algo que no puede hacer más que ayudar al fútbol en tanto cuanto ofrece lugares seguros y estéticamente sobresalientes para practicar fútbol, algo que se agradece. Es obvio que existen más recintos que el Nacional y el Monumental para llevar a cabo eventos deportivos, y acá está la prueba [Esperemos que en el futuro se mantengan igual de lindos, las municipalidades cumplen un rol importantísimo en ello].

Segundo, el mundial pone en el mapa a nuestro país como uno que efectivamente puede realizar eventos deportivos de mediana envergadura (oj) , lo que definitivamente ayuda en varios ámbitos, como el turístico. Desde 1962 que Chile no albergaba la fase final de un mundial (sí ha tenido sudamericanos, clasificatorias varias, pero no una fase final). Además, siempre queda la puerta abierta para futuros eventos. No es menor el hecho que nuestro país sea el primer país sudamericano en ser anfitrión de un mundial femenino, y creo que es algo que hay que aprovechar al máximo.

Tercero, el fútbol femenino viene en un alza gigantesca en el último tiempo, y se está haciendo tan competitivo como el fútbol masculino, ya que varios países son ya potencias en la disciplina, como Estados Unidos, Alemania, Noruega y Brasil (todos equipos que estáran en el mundial). Chile sólo gana al enfrentarse con selecciones como las mencionadas, ya que aprenderán de las mejores, y el camino tampoco es tan largo, porque las rojitas no son malas [Espero que el chileno machista no eche a perder cualquier cosa buena que pueda pasar].

Por todos los pros anteriormente mencionados, los invito a llenar los estadios, para ir a ver a las rojitas (o a quien sea, después de todo esto también debe ser considerado como una fiesta deportiva). Creo que la venta de abonos se terminó, pero cuando escribí la médula de esto, estaban muy baratos (como si eso sirviera de algo). No hay nada mejor y más motivante para un gobierno que se la jugó por traer un mundial, que agradecerle yendo a ver esta fiesta del deporte. Honestamente creo que nos puede hacer muy bien.

Sería todo, gracias por leer y nos veremos pronto. Chau!

domingo, 24 de agosto de 2008

Beijing 2008.


Hola a todos, aprovechando una vez más la contingencia y mientras estoy sentado viendo los canales chilenos que transmiten la última jornada de Juegos Olímpicos, hablaré en este nuevo tema sobre estos juegos, celebrados en la (curiosamente) renombrada ciudad de Pekín, Beijing 2008.

Debo decir que antes que empezaran los juegos no estaba muy entusiasmado por seguirlos, principalmente porque sabía que Chile no lograría mucho. Sin embargo, a medida que pasaban los días, iba prestando atención a varias competencias, y más allá de lo que hiciera Chile, pensé en el espíritu deportivo y que estamos en presencia de espectáculos donde están los mejores del mundo en sus disciplinas. Además, igual es entrete quedarse viendo la tele por la noche, sobre todo para una persona que cree que un canal nacional que transmite las 24 horas no se va a desintegrar.

La ceremonia inaugural estuvo bastante buena, puse el despertador para verla pero al final me quedé dormido con la tele prendida. Eso sí, lo que no me perdí fue el momento cuando encendieron la antorcha, que estuvo de pelos. El atleta vendía la merluza como si estuviera corriendo de verdad. Y quise creerle. Ese fue el momento donde apareció la pantalla azul de la muerte, pero no la vi, sólo la vi en una foto días después. En general hay que decir que China hizo un muy buen trabajo, y en un momento clave para posicionarse como una de las potencias mundiales, de cara a la disminución de poder que está sufriendo Estados Unidos.

Podemos ver entonces que estos juegos olímpicos sacan a la luz algunas cosas: que la lucha por el poder es grande y traspasa el espectáculo deportivo. Todo el mundo hablaba del hecho que Estados Unidos perdió la hegemonía en el deporte al sacar menos medallas que los chinos, algo que en realidad no sé si es tan importante. Por su propia parte, los chinos se están acostumbrando a sacrificar muchas cosas para conseguir éxito material: están occidentalizando la búsqueda del crecimiento económico sin abrir su sociedad, lo que permite que ocurran abusos a las partes más bajas, como hacer que millones de obreros (de todos modos, hablar de millones es poco para un país que tiene más de mil millones de habitantes) cumplan extenuantes jornadas de trabajo.

La misma organización, la presión puesta a sus deportistas para sacar oros (algo que se puede ver en el reclamo para verificar la edad de las gimnastas chinas ganadoras del oro) y la discutible contradicción que se produce al permitir una apertura de prensa total a los extranjeros, mientras que se tapan muchos hechos locales (como los problemas con el Tíbet), hacen que uno se pregunte por lo que dejamos de lado para obtener un lugar entre las potencias. La foto de la derecha, si bien es una parodia, no es lejana de lo que podría reprochársele al país anfitrión, por lo que me parece adecuado mostrarla (además que me cagué de la risa cuando la vi).

Ahora, a un nivel más local, estos juegos nos brindan otra prueba que nuestro país está lejos del desarrollo, ya que sólo se obtuvo una medalla, y no fue precisamente gracias a un trabajo a nivel país, sino que más bien a nivel personal, de Fernando 'mano de piedra' González. Hay que agradecer que Fernando sienta una pasión tan grande por su país y se haya jugado el cuero para ganar una medalla que solamente es fruto del profesionalismo que le da pertenecer al circuito de la ATP.

Ahora bien, tampoco puedo ser tan descriteriado con las falencias del sistema actual, ya que el plan ADO es una búsqueda para mejorar nuestras paupérrimas presentaciones en estas justas que ha aparecido hace muy poco como para que rinda resultados en estos juegos. Sin embargo, se puede reclamar una demora excesiva en la implementación de este plan, y además decir que el plan tampoco constituye una panacea deportiva, ya que en realidad faltan políticas a nivel estatal que fomenten la práctica del deporte a un nivel más general. El plan ADO ayuda a quienes ya están dentro, y es llevado bastante también gracias a los privados. Lo que falta es en el ámbito público y consiste en una motivación a los ciudadanos no sólo a descrestarse buscando ser gerentes, abogados o psicólogos, sino que también buscar fomentar carreras deportivas en centros de alto rendimiento, para que el deporte deje de ser amateur, como lo es hoy en día. La sociedad no sólo crece con científicos y economistas, sino que también con deportistas (y por extensión, artistas).

Al terminar estos juegos tampoco quedo tan ansioso con la junta de Londres el año 2012 (como quedo por ejemplo después de los mundiales de fútbol), pero de todos modos querré sentarme a observar cómo está el deporte chileno y ver lo precioso que es el deporte en general en cuatro años más, aunque sea un ratito.

Al finalizar, agradezco también el esfuerzo de los tres canales chilenos en traernos los juegos (¿qué le pasó a Mega, que de un día para otro dejó de seguir los juegos en la noche?), pero yo me pregunto, ¿qué mierda importa que el atleta x o el deportista y haya venido a Chile? Nuestro país es anfirtrión de ciertos campeonatos pequeños, algunos clasifatorios, lo que hace OBVIO que varios de los atletas o deportistas vengan a Chile, pero no es porque amen nuestro país o respeten a nuestra gente, así que no entiendo que los comentaristas hagan tanta referencia a ese hecho. Paremos de mirarnos el ombligo un momento, por favor.

Uf, tanto hablar de China me hizo pensar en su comida (claramente no en alacranes ni saltamontes), me dieron ganas de comer wan-tan y arrollados de primavera... en fin. Me voy, cuídense y que les vaya bonito. Chau!

viernes, 15 de agosto de 2008

Ocho cosas (edit).

Hola a todos, en esta ocasión aparezco para responder a la cordial invitación de Paola (http://hija-ilustre.blogspot.com/) para nombrar ocho cosas que espero lograr antes de vestir el pijama de palo. Sin mayor demora, aquí las tienen:

1.- Estar involucrado de alguna manera en la producción de una serie de televisión chilena, que compita con otras series chilenas en horario estelar (o sea, en un sentido amplio, llegar a ver alguna vez una parrilla con series chilenas de gran calidad compitiendo en el mejor de los horarios, y claro, estar allí al medio).

2.- Aprender checo, japonés y algún otro idioma (el inglés es muy fácil :P).

3.- Tener un bowling. En serio.

4.- Aprender a tocar mucho mejor la guitarra, y aprender a tocar el piano para alguna vez componer una canción y hacer un cover de Space Dementia de Muse (lo último es más pasional eso sí: si logro lo primero estaré genuinamente satisfecho).

5.- Recorrer muchas partes del mundo, como Bucarest, Sofía, Praga, Tallinn, Riga y todas esas capitales que me gusta aprender por si alguna vez piso su suelo.

6.- Ir a estudiar a otro país, aprender de otra cultura y abrir mi mente a otras realidades.

7.- Ir a ver algún partido de la NBA al Madison Square Garden, y definitivamente ir a ver a mis Sacramento Kings salir campeones algún año. Sobre la misma, ir a ver al Chelsea al Stamford Bridge.

8.- Tener hartos hijos y poder vivir para enseñarles y para conversar largos ratos con ellos.

Bonus: Tener un perro alguna vez en la vida y encargarme de él. Mi mamá no me deja ahora ¬¬ (quizás por eso le doy la importancia que le estoy dando).

Eso sería. Como ven, pido bien poco de la vida. Ahora toca que quien lea esto postee un comentario diciendo qué cosa (o cosas) sería (n) imposibles de lograr.

Las reglas del juego:

1.- Cada jugador comienza con un listado de 8 cosas que quiere hacer antes de morir. Sin importar cuáles sean.

2.- Debes escribir esas ocho cosas en tu blog junto con las reglas del juego y adivinar cuál es la mas imposible de todas.

3.- Por supuesto, vas a seleccionar a ocho personas más, invitarlas a jugar y anotar sus nombres o título de su blog.

4.- No olvides dejar tu comentario desde donde te invitaron a participar.

Lo primero: creo que lo más imposible es la 3... es re caro hacer uno de esos establecimientos. En fin, antes de irme, debo nombrar ocho personas para que hagan lo mismo... hmmm... estúpida regla. Sé que con suerte una persona lo hará, pero en fin.

1.- Mi prima Maca (revive tu blog).
2.- Cagón (por facebook vale igual).
3.- Paz (ídem).
4.- Momo (").
5.- Simón (").
6.- Castro (").
7.- Tobar (").
8.- Jo (").

Sería todo por hoy. Saludos a la Paola, el resto cuídese y nos vemos por ahí. Chau!

domingo, 10 de agosto de 2008

Campañas


Hola a todos, ojalá estén bien. Yo estoy bien, de vuelta en clases y un poco más motivado ahora que me quedan 3 semestres de carrera (eso si los cálculos de mi excelente secretaria de estudios son correctos, lo que puede perfectamente no ser así. Después igual es culpa de uno :P).Ver que ya estoy más que pasado de la mitad de mis estudios me da más ganas de terminar.

Hace tiempo que quería hablar sobre la campaña del gobierno de nuestro país para ahorrar energía eléctrica, gas y agua, y ahora decidí sentarme a escribir un rato. Como que no tengo ganas de estar haciendo esto en realidad, pero a falta de algo mejor que hacer, estoy adelantando tareas :B Mi problema no es esta campaña en sí, sino que los resultados de la misma me hacen pensar que se podría ampliar este tipo de iniciativas para lograr mejorar (muy de a poco) esta sociedad.

La campaña de ahorro energético iniciada en marzo me parece acorde al escenario de emergencia, y es muy distinta a la campaña que incluía a un dibujo animado llamado Gastón, que hacía honor a su nombre (chistosa la wea, a mí me costó caleta entenderla) cuando despilfarraba energía, pero que nadie pescó mucho. El gobierno se puso serio (o quizás, la contingencia hizo que este blando gobierno tuviera que ponerse serio) y le rindió frutos: la campaña actual ha funcionado bastante bien, porque en dicho mes de marzo se ahorró un 10% de la energía que se gastaba. Estas son buenas noticias para todos, ya que ahora estamos en un escenario donde probablemente no vivamos racionamiento.

Hoy en día la campaña fue secundada por una nueva campaña, que esta vez agradece a los consumidores, quienes lograron resultados bastante decentes al seguir los consejos de los de más arriba. A pesar de lo bueno de la campaña, esta es la parte donde empiezan mis reparos y además plasmo mi problema personal, que no es con esta campaña en particular. Como decía, tengo mis reparos, por ejemplo cuando veo el gasto de recursos de todos para regalar ampolletas a gente que nunca antes tomó conciencia que había un problema real. Concedido, el regalo era para gente pobre, pero ese fue un ejemplo típico de entregarle todo en las manos a gente que necesita ser educada (como dice el meloso y cliché ejemplo de enseñarle a pescar en vez de darle el pez en la mano). Después no podemos alegar por gente que, en general, no se esfuerza por conseguir las cosas. Ahora bien, en una perspectiva más general, esta acción sirvió para llegar a estos positivos números.

Todo esto está perfecto, yo no podría ser más partidario de la campaña y disfruto al igual que todos de los resultados. SIN EMBARGO (y acá está el quid del asunto) aparece el pensamiento que me caracteriza, que consiste en preguntarme ¿por qué no seguir tratando de hacerlo mejor?, al observar que las cosas están saliendo medianamente bien. Por lo que mi planteamiento es el siguiente: Si resulta una campaña para ahorrar luz, ¿por qué no va a resultar una campaña que invita a reciclar?

Si dejamos muchas variables constantes (ceteris paribus, como me gusta quebrarme a mí), como la del gasto en una campaña como esa por ejemplo, me parece que sus resultados pueden ser bastante auspiciosos, más encima cuando vemos un mundo que cada día se siente peor al ensuciar y que se da cuenta que si fuera más organizado, las cosas estarían mucho mejor. Mi invitación consiste entonces en generar una política pública (claro, aprovecho de aplicar materia, si para algo sirve mi estudio) que busque un programa de reciclaje en este país que nunca sabe bien qué hacer con la basura, y que mientras se decide la va apilando peligrosamente.

Siempre es momento de hacer las cosas mejor, no hay para qué esperar a estar mal para tomar medidas importantes, por lo que creo que siempre se está en deuda con alguna iniciativa que ayuda a mejorar el ambiente donde vivimos, para lograr una mejor calidad de vida tanto para nosotros como para los que vienen.

Ya, me retiro ahora, seguiré viendo los Juegos Olímpicos, probablemente en la camita. Alguna dama interesada en acompañarme puede muy bien dejármelo saber. Cuídense y que les vaya bien en lo que estén haciendo. Nos veremos por ahí, en la realidad o en la virtualidad. Chau!

PS: No se olviden de votar en la encuesta :)

lunes, 28 de julio de 2008

Edición Especial: Muse en Chile


Hola a todos, espero que estén muy bien. Yo estoy con un resfrío que me ha durado como 10 días, pero estoy la raja porque el 26 fui al recital de Muse en Chile. Ahora me dejo caer para comentar un poquito sobre este espectáculo, uno que difícilmente olvidaré.

No creo poseer mucha experiencia en recitales, he ido a tres eventos que se podrían categorizar de grandes, a más de un par de tocatas locas y he escuchado a unas cuantas bandas por ahí, en lugares urbanos si se quiere, pero creo que el recital del sábado recién pasado fue un espectáculo notable, que no se da todos los años y que dan ganas de repetírselo hasta el cansancio. Sin exagerar, creo que ha sido el mejor recital al que he ido en la vida.

Muse me encanta, compré la entrada entusiasmado por ir a ver una banda que está buscando su mejor momento, porque extrañamente todavía no lo vive. Debo reconocer que su último disco Black Holes And Revelations no es su mejor trabajo, pero de todos modos es un disco que tiene temas memorables, como Map Of The Problematique, Invincible, Knights Of Cydonia, y uno de mis favoritos, City Of Delusion. Iba a divertirme y a corear muchos temas, anhelando secretamente escuchar Space Dementia, quizás el tema que más me vuelve loco de ellos. Lleno de esperanza llegué al Teatro Caupolicán con mis primos. Una vez dentro (un par de horas después), debo confesar que la ubicación no fue la mejor, ya que compré palco B, y quedé muy al costado, por lo que algunos amplificadores me quitaban parte de la visual, pero esto sirvió para ver qué lugar es el mejor para presenciar algún evento en el Caupolicán. ¿Mi respuesta? Platea baja. Estás casi donde mismo estaba yo, pero unos metros más arriba, justo para ver el escenario completo. Desde ahí nadie salta arriba tuyo y puedes tomar muy buenas fotos. La cancha también es un muy buen lugar, no es que tenga nada en contra de ella.

Así comenzó el show. Lleno de ganas de cantar recibí los temas, que uno a uno fueron:

1. New Born: ¡Qué manera más exquisita de empezar el show!
2. Dead Star: Era probable que tocaran este tema, por lo que le di una escuchada la noche anterior. Igual no me sirvió para corearla :(
3. Map of the Problematique: Buen tema, que ahora suena mejor :)
4. Supermassive Black Hole
5. Butterflies & Hurricanes: Temón. Nada más.
6. Citizen Erased: Una placentera (y casi orgásmica) vuelta a Origin of Symmetry, a mi gusto su mejor álbum. Como ya dije, faltó Space Dementia, acá presente :(
7. Feeling Good
8. Drum & Bass: Su jugueteo con los instrumentos.
9. Invincible: Un tema que suena cada vez mejor, parece un himno a la 'invencibilidad' (no imbecilidad).
10. Hysteria
11. Starlight: Quizás el tema más conocido de Muse. No mi favorito (pero no por eso malo).
12. Time Is Running Out
13. Stockholm Syndrome + Receso
14. Take a Bow: Un tema que no me convence mucho, pero que sonó muy bien.
15. Plug-in Baby: Qué manera de saltar con este tema ^^
16. Knights Of Cydonia: Cuando este tema empezó a sonar, todos sabíamos que se nos acababa el recital, así que lo gozamos aun más.

Lamentablemente encontré que el show estuvo muy corto, por lo bajo faltaron sus 4 temas. Yo (por tercera vez) deseaba escuchar Space Dementia con todo mi corazón, aparte que merecíamos escuchar temas del primer disco, como Sunburn y Showbiz, y faltó Apocalypse Please, el tema que se me ha pegado más recientemente. Pero la lista pudo haber crecido con muchos otros temas, un lujo que no muchas bandas se pueden dar.

En fin, la presentación fue impresionante, fue una hora y cuarenta minutos de excelente música y un bastante buen juego de luces para lo chico del lugar. Para la próxima vez todos nos merecemos un recinto más grande, como su Arena Santiago, por ejemplo. Gracias MUSE. Son parte de mi pentágono musical para siempre.

Gracias por leer, y ojalá que cagón escuche a Muse luego y que deje de perder el tiempo. Si decides hacerlo, un consejo: empieza por su disco Absolution.
Cuídense, chau!

viernes, 18 de julio de 2008

Edición Especial: Batman, el Caballero de la Noche.


Hola. Este post es básicamente una opinión sobre la nueva película de Batman: El Caballero de la Noche, desde mi particular punto de vista. Quien no haya visto la película y desee verla antes que alguien más le cuente otra cosa, por favor no lea más. Lo que sigue está lleno de spoilers. Quedan advertidos.

Yo no acostumbro a hacer esto, pero debo decir que esta película se merece una columna mía (wena po). Yo no soy fanático de estas películas sobre comics, porque en realidad nunca me han llamado la atención. Simplemente creo que las historias de tipo fantástico o como se les llame son inferiores a las historias de ficción pero, digámosle, humanas, es decir, que pueden ocurrir de a de veritas. Sin embargo, esta película me dejó muy satisfecho y valió cada uno de los $2900 que costó la entrada.

Todo se lo debo agradecer a mis primas, quienes me invitaron a su junta para ver al señ-- caballero de la noche. Esto hizo andar toda una maquinaria que había dejado tirada cuando Batman Inicia se estrenó en los cines. Todavía recuerdo cuando le dije a mi hermana que quería ir a verla, todo porque su nombre me tincaba exactamente lo que Cristopher Nolan (el director) quería lograr, una reinvención del hombre murciélago. Resulta que nunca la fui a ver, de hecho, la vi hace tres noches atrás. Y no me gustó mucho como creí que me gustaría. Vi en ella un superhéroe que no tenía nada claro, que se jactaba de tener más y que era como cualquier otro idiota recogido de algún lugar de clase social alta (con la parte de la cárcel vietnamita (si es que era de allá) se me vinieron a la mente muchas de las personas que se van a construir mediaguas de Un Techo Para Chile, que son jóvenes con mucha plata pero con problemas de culpa por lo que son y lo que tienen), en resumen, un hombre lleno de miedos que evadió muchas cosas por muchos años. Encontré que para ser quien era, ese hombre debía tener las cosas un poco más claras. Fue más que nada un ejercicio de ver nacer a Batman de nuevo, quizás demasiado largo y con un antagonista débil, una no muy buena técnica para esta fórmula.

Que me perdone el espantapájaros, su propósito era muy interesante ("Jonathan Crane [...] es un ex-psicólogo loco que usa una variedad de drogas y tácticas psicológicas para usar los miedos y fobias de sus adversarios. No comete sus crímenes para ser rico, sino que más bien como una forma de 'investigación' para el estudio futuro de los efectos del miedo en los humanos, haciendo a los inocentes ciudadanos de Ciudad Gótica sus ratones de laboratorio" Sin la Wikipedia no sería nada.) pero nunca vi una historia fuerte con respecto a él. En cuanto al personaje de Liam Neeson, me aburrió toda esa historia del monte y el maestro y Bruce incapaz de llevar a cabo un acto de justicia y la posterior quema del lugar y la máquina que se robaron y el metro y el edificio Wayne y bla bla bla... no.

Al parecer Nolan nos quiere dejar en claro en los primeros minutos de El Caballero de la Noche que no volverá a caer en lo mismo. En un santiamén vuelve a poner en la cárcel al espantapájaros y a un montón de otros malos para seguir con otros asuntos. En particular, enfrenta al Guasón. Acá Heath Ledger se manda una excelente actuación, donde nos muestra a un villano extremadamente humano (no de bueno, sino que no es tecnológico ni usa armas tremendas ni nada de eso) y con un solo obejtivo en mente: matar a Batman para que Ciudad Gótica vuelva a ser lo que era: una ciudad sin futuro debido a la calidad de ciudadanos que posee. Es notable ver al Guasón explicar varias veces cómo consiguió sus cicatrices, con lo que podemos ver que su historia pasada no es un tema importante, sino que es el futuro el que llama la atención del villano (ver a Ciudad Gótica arder). Me reí mucho cuando deja su tarjeta (la talla funciona en inglés (card= card), ya que es una carta) y cuando aplaude el nombramiento de Gordon como Comandante (creo que era ese cargo). Y me tuvo expectante toda la película. Descansa en paz, Heath Ledger.

Esta película me dio más de lo que efectivamente estaba esperando. Me pareció genial (en el sentido explícito de la palabra, o sea, un acto de genios) el experimento social que realizó el Guasón entre los dos barcos, uno que trasladaba prisioneros y otro que llevaba a gente de bien. Creí que el hombre de bien haría explotar el barco, en serio lo creí. También creí que Batman rescataría a Rachel Dawes (Maggie Gyllenhaaal, quien reemplazó a Katie Holmes, la nueva miembro de la cienciología), pero cuando apareció donde Harvey Dent (bien actuado por Aaron Eckhart, el dueño de la fábrica de dulce de membrillo) quedé anonadado. Más para dentro quedé cuando Dawes efectivamente se murió con la explosión y bueno, como no sabía que Harvey Dent era el nombre de Dos Caras, también fue una sopresa ver a ese personaje (eso sí, la cara le quedó para la historia, me estaba preguntando cómo sobreviviría mucho tiempo en ese estado). También fue una sorpresa ver la 'no muerte' del personaje de Gary Oldman y finalmente, con una sonrisa en la cara me dejó el final, donde James Gordon (Oldman) nos dice que Batman será perseguido porque es el superhéroe que Gótica se merece: uno que no sea considerado como un buscador de justicia, sino como un criminal vengativo.

De todos modos, y antes de darle el punch final al escrito, debo decir que en esta película estamos frente a una contradicción que es pasable debido a todo el carácter de la película (digo contradicción por el enfoque general del guión de mostrar una película más aterrizada): mientras vemos a villanos más humanos, vemos a un Batman cada vez más sofisticado y tecnológico, rayando en lo inverosímil. En Batman Inicia hubo demasiados segmentos donde Batman (Christian Bale) aparece en la 'oficina' de Lucius Fox (Morgan Freeman) para encontrar juguetitos con los que combatir el crimen que me parecieron mucho. Esto se vio menos en El Caballero de la Noche, pero había que hacerse cargo. Me cargó el Batimóvil también. Esto justificaría que en la vida es el mal el que gana, y el bien debe armarse hasta los dientes para poder por lo menos dar la pelea. Y por Dios, ¿cuál es el problema de Wayne cuando se pone el disfraz que tiene que hablar con esa voz tan gastada? podría trabajar un poco más en eso también.

Con todo lo anterior creo llegar a una conclusión más o menos clara: en realidad nunca me interesó Batman ni su historia, y en realidad creo que nunca me interesará, porque después de todo sabemos que siempre salvará el día. Además, todos tenemos problemas con los cuales lidiar, y los de Bruce Wayne no son más importantes que los de cualquiera de nosotros. Parece que lo que me gusta ver a mí es un guión dado vuelta, con dilemas morales, con buenos tornándose malos, con buenas actuaciones y personajes humanos y que al fin nos dé a entender que la línea entre el bien y el mal es muy pero muy delgada. Batman: El Caballero de la Noche logró esto de manera notable, y se merece un aplauso (el cual le di, junto con como dos tarados más (en una sala de cine donde habían como 100 personas)).

Si tuviera que ponerle nota a esta película, le pongo un 6,5. Estuvo muy cerca de ser un producto perfecto. Sería todo por hoy, ahora me despido por el momento. Cuídense y que les vaya bonito. Chau!

PD: ¿Quién quiere ir a ver Wall-E conmigo?

lunes, 7 de julio de 2008

El Sueño.

Hola. Espero que todos estén muy bien y con ganas de leer. Vengo saliendo de un muy entretenido fin de semana, donde olvidé todo lo que trabajé en la semana (que honestamente no fue demasiado, pero igual fue bastante y además no andaba con muchas ganas de hacerlo) y me entretuve mucho. Fui a ver Hancock con mi amigo del alma Simón, y estuvo bien entrete. Tenía una historia mamona un poco innecesaria, pero de que me entretuve, me entretuve. Luego fuimos a bolsear donde Momo (otro amigo del alma) hasta anoche. Aproveché de pasarlo bien para prepararme para esta semana, que también será pesada. No me traten de ubicar (así como lo hacen ahora (risas)) los días 8, 9, 10, y 11, ya que estaré estudiando y luego durmiendo.

Estos días a uno le sirven porque, sin exagerar, le dan ganas de vivir y motivación para realizar las tareas que se presenten. En esa tónica me presento hoy para hablarles de un sueño que tuve, que me dejó pensando bastante en mi vida, el fin de la misma y el futuro. [Hablando de la muerte, hoy es 7 de julio, un día donde se cumplen 6 años desde que mi papá falleció.] Como no hay que esperar el momento perfecto para hacer algo (porque dicho momento no existe) simplemente empecé a escribir y a esperar lo mejor. Allá voy.

Hace como tres meses atrás, cuando todavía tenía 21 años, tuve un sueño. Este sueño tenía como protagonistas a dos patos. Recuerdo que yo también estaba en el sueño, y me encontraba en un prado, supongo que en alguna parte del campo chileno. No recuerdo a nadie más, y que estábamos yo y los patos, interactuando. Luego, en extrañas circunstancias, los patos comienzan a luchar por su vida. No logro recordar bien si yo atenté contra ellos o algo les pasó. La cosa es que al final los dos patitos perdieron la vida. Me acuerdo de haber mirado sus cuerpos inertes (alguno probablemente ensangrentado) y haber sentido la situación, ya que en realidad no es un deseo personal ver a dos patos vivos y al rato muertos.

En fin. Despierto como en un día más, claro que en éste me decía "el sueño pa' extraño que me mandé...". Nada parecía cambiar mientras me vestía, pero resulta que en un momento determinado le di un par de vueltas al sueño y llegué a esto:

Patos... dos ---> par de patos ---> 22...
Muerte... PAR DE PATOS MUERTOS ---> catástrofe mental.

En el advenimiento de mi cumpleaños número 22, me quedé pensando un minuto acerca del sueño y me pregunté: "¿acaso moriré a los 22 años?", "¿moriré bajo extrañas circunstancias?", "¿me mataré o no me acordaré de cosas que haré pero que terminarán con mi vida?", etc. (de ahí vienen cosas con menos sentido aun que ya se escapan de algo relevante.) Siempre calmado le cuento esto a mi mamá, a quien realmente pareció no importarle en lo absoluto el hecho, ya que no le dio ni siquiera una vuelta y me dijo que comiera mi comida (por si se preguntan parece que era fin de semana, porque no recuerdo haber tenido universidad (media wea en todo caso) y me levanté directamente a comer, como ocurre varias veces.). Sin embargo esto levanta algunas preguntas para mi persona, después de todo se trata de mi vida, ¿no?

Si realmente prestamos atención al sueño como un mensaje, hay que considerar al mismo desde lo directo (relacionado con lo explícito del mensaje) para llegar a lo indirecto (el sueño como mensaje de algo más). Así comencé el análisis. Hablando estrictamente de la muerte, lo primero que hice fue un breve ejercicio de descarte, donde me doy cuenta que por ahora no atentaré contra mi vida de ninguna manera, así que la opción del suicidio está descartada, tal como dije, por ahora. Eso significa que si muero a los 22 años, no será porque yo lo quise. Luego me pongo a pensar en las formas en las que podría morir, y realmente por problemas de salud no lo creo... así que lo único que queda es en un accidente o que alguien deliberadamente atente contra mi vida, cosa no imposible pero sí bastante improbable.

Ahora, si vemos esto como algo más... relacionado a la vida, probablemente estamos en un escenario donde yo mismo me advierto sobre vivir y aprovechar lo que la vida me ofrece. Quizás la muerte del par de patos marca un punto de inflexión en mi vida, donde cosas cambian, uno cambia y realiza un ejercicio de aprendizaje (pucha que me gusta esa palabra) para ser una mejor persona. Sin ser sobrado, creo que este último tiempo he aprendido bastante sobre hartas cosas, y soy mejor que hace tres años, y mejor aun que hace 15.

Creo que las cosas van más por este último lado, porque he vivido ya más de un mes en este nuevo traje y debo decir que las cosas están casi igual. Podríamos destacar el hecho que me dio la peste cristal apenas cumplí años (en realidad, la peste se manifestó un día después, pero el virus estaba dentro de mí hace tiempo) como un intento despiadado de algún ente superior de atentar contra mi vida. Pero al final lo único que sufrí fue una picazón de los mil demonios y un par de noches con fiebre soportable. De todas formas, si sufrir pestes cristal (ahora en sentido figurado) todo el año es la forma de seguir con vida, tomo este camino sin dudarlo. Total, lo que no te mata te hace más fuerte.

De todos modos (y ya para ir cerrando), si llego a perder la vida a los 22 años, debo decir que me iré bastante tranquilo. Estaré muy insatisfecho por no lograr realizar muuuuuuuuchas cosas, como perder mi virginidad (¿mucho detalle? Lo siento. Igual es mía la imagen en juego...) y sacar mi carrera para lograr mantenerme por las mías por ejemplo. Sin embargo nunca me podré quejar de no sentirme querido y apreciado por mucha gente, respetado por otras y temido por algunas otras (Maquiavelo hoy sería una estrella). No puedo decir que viví una mala vida, porque tuve una muy buena infancia y me estaba creando una respetable vida adulta. Sería injusto partir justo ahora cuando me puedo valer de mí mismo más que nunca, tengo la cabeza llena de ideas y tengo muchas ganas de lograrlo todo y claro, puedo aprender y conocer millones de cosas nuevas, pero ¿quién dijo que todo esto es justo? Espero que mi familia y los que me quieren queden bien y no se preocupen, ya que si se da, yo no estaré preocupado. Porque como Epicuro preguntó a sus alumnos cuando hablaba de la muerte: "¿para qué sentir temor de algo que aparece cuando nosotros ya no estamos?"

lunes, 30 de junio de 2008

Justicia al fin!

Hola a mis queridos lectores, espero que estén bien. Yo estoy bastante bien, aunque me siento un poco mal porque no puedo plasmar algo bueno en este lugar, que tengo botella. Sé que no es bueno pedir perdón muchas veces (porque nadie aguanta que la cagues tantas veces), pero estoy realmente falto de ideas para hablar, en mi cabeza sólo se hilan historias irracionales, que sin embargo me hacen faltar a las clases de la mañana. Es divertido lo que ocurre en realidad: pongo el despertador, el cual apago como un zombie todas las mañanas. Una vez que "despierto", miro a mi alrededor y pienso en levantarme. De repente, así de la nada, aparezco en otro lugar, viviendo una historia. Luego despierto nuevamente, y así se repite el proceso. Son historias re buenas, pero podrían aparecer antes, cuando trato de quedarme dormido en la noche y no lo logro, pero bueno...

Honestamente, me dejé caer ahora en honor a Junio, para postear algo en este mes que se nos va. Ahora que lo pienso, sí tengo algo que contar, pero no lo haré aun, porque estoy corto de tiempo. En fin, a continuación los dejo con un grupo que me agarró hace dos días, y no me quiere soltar. El grupo se llama Justice, y es el primer grupo de electronica que me hace algo. Recomiendo su disco debut, † (o Cross) para bailarlo o disfrutarlo piolamente.

Los dejo con el tema D.A.N.C.E., que tiene un video muy original. Honestamente me gusta más su tema Genesis (que me recuerda a Jesucristo Superestrella y a Thriller de Michael Jackson en una mezcla asombrosa), pero no tenía video original :^(

Me voy por ahora, ya vendrá una entretenida (y quizás tirada para, irónicamente, thriller) historia relacionada con lo primero que les hablé, un sueño...
CuídenseN y que estén bien.
Chau pescau!


sábado, 17 de mayo de 2008

Jorge <3 The Shins

Mi amor por The Shins es creciente (¡Hasta me sé el nombre de uno de sus integrantes! (James Mercer, vocalista)) Creo que mi pentágono de la verdad musical tendrá ahora a The Shins, con lo que uno de sus presentes integrantes bajará a la segunda división musical. Pero eso aun no lo decido bien. Acá dejo un tema que puede ser fácilmente el mejor del grupo, se llama A Call To Apathy, o bien Gone For Good, yo lo conozco como el primero, pero el nombre más popular aparentemente es el segundo. Dos cosas para terminar: por favor, lean la letra que está muy re buena, y el hecho de ir a tu sótano a tocar una canción porque sí realmente me deja extasiado (por no decir mojado). Lamentablemente no tengo sótano, ni tampoco soy perito en la guitarra, y demonios, no tengo ningún partner musical ni menos alguna canción escrita. Creo que me faltan un par de cosas.

Un saludo grande y ya volveremos con más.
Chau!



The Shins - Gone For Good

Untie me, I've said no vow
The train is getting way too loud
I gotta leave here my girl
Get on with my lonely life

Just leave the ring on the rail
For the wheels to nullify

Until this turn in my head
I let you stay and you paid no rent
I spent twelve long months on the lam

That's enough sitting on the fence
For the fear of breaking dams

I find a fatal flaw
In the logic of love
And go out of my head

You love a sinking stone
That'll never elope
So get used to the lonesome
Girl, you must atone some
Don't leave me no phone number there

It took me all of a year
To put the poison pill to your ear
But now I stand on honest ground, on honest ground

You wanna fight for this love
But honey you cannot wrestle a dove!
So baby it's clear...

You want to jump and dance
But you sat on your hands
And lost your only chance

Go back to your hometown
Get your feet on the ground
And stop fucking around (en la original dice 'floating', pero viva la informalidad)

I find a fatal flaw
In the logic of love
And go out of my head

You love a sinking stone
That'll never elope
So get used to used to the lonesome
Girl, you must atone some
Don't leave me your phone number there
['cause honestly I do not care]

sábado, 12 de abril de 2008

Vacaciones 2008: Un esperado resumen, parte dos: El Sur.


Hola nuevamente. Espero que estén bien y con ganas de leer. Yo estoy rehusándome a hacer las cosas para una universidad que estará un poco cargada la próxima semana. La segunda parte de mi relato vacacional está aquí, y con la misma cierro el capítulo que tanto disfruté hacer, y parece que ustedes también disfrutaron bastante. Esta vez hablaré de mi estadía en el sur de Chile, donde estuve un par de semanas que más que nada fueron para relajarse y olvidarme de lo malo.

Como iba diciendo entonces... Habiendo ya terminado el trabajo que debía realizar para la universidad (ese del que tanto hablé en mi aventura a Tongoy) me veía con mucho tiempo en mis manos y de vuelta en Santiago. Analizando esta situación recibí la cordial invitación de mis tíos (y mi hermana que estaba un poco ilusionada con mi presencia) al sur, más específicamente al pueblo de Vegas de Itata, donde mis tíos tienen una casita. Lo pensé casi 7 segundos, y dije que sí, más que nada por el hecho de poder tirarme a descansar, a hacer nada y a no estar cerca de nadie (cabe mencionar que no llega señal telefónica, así que mientras nadie sufriera algún percance, todos se podían ir a la cresta por este tiempo).

Dado que me iba a un lugar lleno de tranquilidad y nada mucho pasaría una vez que llegara, quise entonces ponerle emoción al viaje (entendido como el desplazamiento físico entre un punto y otro, no al viaje como experiencia completa): el día 12 de Febrero compré el pasaje a Coelemu (ciudad relativamente grande cercana a Vegas) en la prestigiosa flota de buses Villa Prat (ya, si tampoco es mala, el comentario lo hice de mala onda no más) a las 10 am. Resulta que el día 13 llegué a las 10:06 al terminal... y el bus se había ido. No lo podía creer. Fui al local del Villa (chia) y me dijeron lo que tanto temía. Mi tía, como si se lo hubiesen dicho a ella, me llamó en ese preciso instante, y yo procedí a tragar saliva. Gulp. Contesté y recibí un medio sermón (no fue uno entero, fue más bien moderado) junto con la instrucción de cambiar la hora del pasaje mientras le pasaba con el caballero que vendía los boletos (no sé por qué quería hablar con él, si el señor no tenía pito que tocar). Él le explicó entonces que me subirían en el próximo bus que saliera, a las 13:20 horas, y que no se preocupara. En conclusión, el pasaje sí se podía cambiar en el caso que persona se aweonara. Está de más decir que me encantó esa cláusula y que por la misma volvería a viajar en el Villa.

Así, me quedé con tres horas para rellenar (no me iba a devolver a mi casa, ya que andaba cargado casi como cuando iba al norte). La primera cosa que hice fue sentarme en el patio de comidas del terminal Alameda. Decidí desayunar en el McDonald's y mientras veía el Buenos Días a Todos (El Matinal de Chile) dentro de mí se llevaba a cabo una interesante conversación:

- Conciencia: ¡Cómo se te pasó el bus, por Dios!
- Humbertito: ¡Pucha! Jamás imaginé que el bus se iría tan justo... he tomado más de una decena de buses en mi vida y NINGUNO había salido a tiempo. Cuando fui a Mendoza, ¿te acuerdas?
- C: Claro, estuve allí.
- H: Cierto. Ese bus, el que salía de Santiago - al cual también llegué tarde - no salió a la hora, de hecho, menos mal que no salió a la hora, si no como 10 minutos después, porque si no, no llego.
- C [un poco alterado y recordando algo sin mucha importancia]: Igual la wea se tuvo que devolver porque el paso estaba nevado...
- H [volviendo al tema que los convocaba]: Sí wn... pero ¿viste? Cuando iba a San Carlos, cuando fui a Tongoy, esa wea llegó a la hora del pi--
- C: Entiendo tu punto, pero no por eso debes llegar tarde. Ahora llama a tu madre para avisarle.

Mi madre reconoció el hecho pero también se dio cuenta que no había nada que hacer. Eso es una de las cosas que más me gusta de ella. Así que sólo cabía esperar. Decidí apagar todos mis artefactos de música (que aquella vez alcanzaba la suma de 2, porque le había pedido "prestado" el iPod a mi hermano, y llevaba mi mp4) para poder escuchar mucha música (y ver alguna serie) en un viaje que duraría aproximadamente 6 horas y media, efectivamente cuando estuviera viajando.

Así pasaron las horas, y el bus llegó (por fin) unos diez minutos antes de las 13:20. Me subí a buscar mi asiento revalidado, y estaba ocupado. Dos señoras habladoras estaban en el 9 y el 10, una de ellas ocupaba el 9, MI ASIENTO. Después de un momento dubitativo las encaré, y me dijeron que harían lo posible para arreglar la situación, una vez que el chiquero arriba de la máquina se apaciguara. Efectivamente, mirando para atrás, había muchos asientos ocupados y en general había bastante desorden. La señora de más edad (también la más conversadora) tenía como el asiento 31, así que después de arreglado el embrollo, se fue con viento fresco. La otra señora estaba en la ventana, es decir, en el 9, MI ASIENTO. Esta vez, con pocas dudas se lo pedí. Ella se sorprendió un poco por la petición y me preguntó si hacía alguna diferencia. "Sí, me gusta mirar el paisaje cuando viajo." Seco. La señora se cambió al 10. Así, el viaje comenzó.

Casi siete horas después, donde el auxiliar colocó El Transportador 1 y 2, así como una película de Ethan Hawke donde se muere todo el mundo (menos él); luego de haber visto un par de series en el aparato musical de mi hermano y haber escuchado como 5 discos de música enteros en el mío; y después (por qué no mencionarlo) de haber hablado unas cuantas palabras con la señora (quien se bajó como una hora antes que yo), llegué al terminal de Coelemu. Exhausto. Me dolía la cabeza y tenía ganas de quedarme parado para siempre.

Pasado ese día, todo fue más o menos similar: días tranquilos donde íbamos a zonas cercanas (un bonito ejemplo fue cuando fuimos a dejar a la tía Casimira (gran valor) a Tomé) o bien nos quedábamos allí, íbamos al río Itata (muy rico para bañarse, pero estaba muy requete bajo) y luego caminábamos, comíamos y descansábamos. Y por las noches conversaba un rato con mi hermana y veíamos películas (aquí vi las dos Exterminio, que en realidad me decepcionaron demasiado) hasta que me quedaba dormido, y dormía como lirón. Lo que eché de menos eso sí fue alguien apañador, que tomara fotos de cualquier estupidez y que aceptara caminar en la tarde (porque caminar en la noche igual me daba un poco de cositas) por ahí. Pero de todos modos no me quejo: igual fui a lanzar el boomerang que me regalaron y mi hermana quiso grabar algo (que no le haya resultado fue otra cosa). Fue mejor en todo caso, porque no logré que la lesera se devolviera.

Y bueno, para terminar el paseo (y para justificar la foto de más arriba), los últimos 4 días fuimos a las Termas de Chillán-- bueno, a unas cabañas que estaban un poquito más abajo, pero es como lo mismo. La última tarde fuimos a bañarnos a unas aguas termales que estaban bien calientes pero que eran bastante ricas, además me hicieron un masaje bastante bueno. La chiquilla tenía buenas manos y al parecer habilidades meta-físicas, ya que mientras me masajeaba las manos y los pies me describió entero fallando sorprendentemente poco.

Y bueno, había llegado el tiempo de volver. El viaje a Santiago salió perfecto, así que mi historia termina aquí. Han sido ustedes testigos de mis vacaciones 2008, unas pequeñas vacaciones que significaron hartas risas y harta distracción de mi vida cotidiana. Me retiro ahora, debo estudiar. No quiero repetir la misma historia de siempre, conmigo llegando al día de la prueba diciendo: "¡No me leí todos los textos! ¡Soy tan estúpido!"
Cuídense harto y nos belmont.
Chau!

PD: Un saludo a la Cari, la joven del dating show Amor Ciego, quien eligió a Edmundo como su pretendiente (en una decisión que no sé quién no veía venir. Hasta yo, que nunca vi el programa, sabía que lo elegiría). Le agradezco de todo corazón por no destruir el planeta y el ordenamiento cósmico al continuar con la costumbre de una modelo saliendo con un futbolista (o en este caso, un par de tristes 'aspirantes a'). Entre ustedes se entienden.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Vacaciones 2008: Un esperado resumen, parte uno: Tongoy.


Hola a todos. Espero que estén bien y que les esté yendo bien en lo que hagan. Yo hace tiempo que me debía dejar caer por estos lados para contar el resto de mi aventura en cualquier otra parte que no fuese Santiago. El tiempo ya no está como para contar sobre las vacaciones, pero mala cuea no más. Además, si quiero seguir hablando sobre otras cosas (que, sin bromas, se empiezan a apilar) debo terminar esto. Para ser breves, en realidad nada fue tan entretenido como el viaje de ida a Tongoy (como para contarlo, porque las vacaciones estuvieron buenas, pero no todo es para contarlo), así que esta entrada será más que nada un lindo envoltorio para estas buenas vacaciones.

El demorarme en escribir también hizo que me olvidara de bastantes cosas, pero sobre Tongoy recuerdo haberlo pasado muy bien con mis primos y haber conocido a los primos de mis primos (que no son mis primos :P), haber ido a la fiesta más pokémona de mi vida (y que espero (Dios mediante) que no se repita) donde bailé en la oscuridad absoluta canciones que gracias a Dios (ando más religioso que nunca, se me pegó de la semana santa seguramente) ya olvidé. Sólo diré que Daddy Yankee ya es pasado en el mundo del reggaeton, y hoy los emperadores son otros. Y yo que daba por muerto a este especial baile como el 2007... al parecer me anduve equivocando.

¿De qué más me acuerdo? Bueno, de la niña de azul de la micro que estaba bien rica, pero a la que obviamente no le hablé (porque, seamos francos, es bien difícil hablarle a una mujer sólo porque sí. Uno siempre busca la excusa (quería tirar el gorro que tenía puesto, pero nunca se me ocurrió la manera óptima y menos sospechosa de hacerlo) para lograr algún contacto, pero en realidad la vida tendría que hacerme un flaco favor para lograr algo, como que se vuelque la micro en la que íbamos o como que quede atascada en alguna parte... a veces tener todo bajo control no ayuda tanto... ¡invoco al caos!). Y más encima después pasó por fuera del restaurant donde estábamos comiendo. Aunque bueno, como me pasa siempre, seguramente estaba pololeando o andaba detrás de un loco.

También me acuerdo de la conversación que tuve con mi tío principalmente sobre la familia y sobre el tan agraciado trío de hermanos que conformamos mi hermana, mi hermano y yo, quienes estamos solos y el tiempo que han (bien leído, han, no 'hemos') estado con alguien tiende a cero. Me acuerdo de la gente que conocí en las cabañas del banco (quienes claramente (y obviamente no los culpo) me conocían como 'el perdido'), el amigo (uno más) de mi tío que tenía una voz pastosa, y la pelirroja pokemona que era una especie de cheque a fecha... peeeeero hasta por ahí no más. Obviamente me acuerdo de las empanadas de ostión-queso (las mejores), camarón-queso y macha-queso que nos comimos con mi siempre apañador primo... se me hizo eso sí con la loco-queso (no soy muy fanático del loco, me gustan las locas (no los homosexuales pasivos)). Me acuerdo de las cabañas 'momo' (mientras mi socio poco después fue casi desmaterializado por un motociclista), de las cientos de fotos que tomamos (mención especial es aquella donde salgo oliendo la flor), de la película Exterminio que nunca vimos (porque en realidad no la había llevado :P (en todo caso después vi las dos y son como las weas)) y de mi caminada extraña con hawaiianas (¡me cargan!), del berries y de los completos del carrito, del bingo y de los extraordinarios churros. Y por supuesto, de la tranquilita playa donde hasta llegué hasta las boyas jeje (yo lo veo como crecimiento personal).

En resumidas cuentas, todo estuvo la raja. La vuelta a Santiago fue perfecta, así que no hay nada que contar. Al final me alargué igual (a estas alturas no sé quién no lo veía venir) así que partiré este resumen en dos. La primera parte ya fue, y consistió en Tongoy. La segunda parte será sobre el sur, donde fui con otros tíos a Vegas de Itata (dejémoslo en el sur no más) y a 'cerca de' las Termas de Chillán (porque no fue en el complejo mismo jojo).

Ya, me despido por ahora, que les vaya bonito.
¡Chau!

PD: Obviamente el nuevo nombre del blog se dio por mi aventura entre las ciudades de Los Vilos y Tongoy, donde un profeta usó ese dicho para contar mi aventura antes que ocurriera. Yo sólo cumplí con los designios del destino.

martes, 4 de marzo de 2008

Edición Especial: Cagón.


Hola a todos. Me tomo un "descanso" del tema de las vacaciones un segundo (después de todo, mucha vacación aburre) para tirar unas líneas a mi amigo cagón y desearle lo mejor en su viaje (o mejor dicho, traslado) a Australia.

Mi historia con él data de séptimo año básico, nuestro primer año en el Instituto Nacional. En ese entonces no éramos amigos (yo me llevaba con otra persona al igual que él) pero nos conocíamos. En esos primeros años se le puso el sobrenombre con el que lo tildamos hasta el día de hoy, principalmente porque donde pasaba, dejaba su huella (o sea, donde fuera se mandaba alguna cagá). Así, los años fueron pasando y nos fuimos conociendo mejor, y me fui dando cuenta de lo bacán que es. Con el pasar de los años, junto con Castro (y más tarde momo y Gatica) se fue formando un grupo muy especial, ya de hermanos, quienes nos seguimos viendo a pesar de que salimos del colegio el año 2004. Muchas cosas se logran con voluntad.

El día de hoy, Andrés (ese es su nombre, por si acaso) inicia su nueva vida en otro continente, muy lejos de acá, en Australia. Allá espera tener una mejor oportunidad y lograr desempeñarse en lo que más le gusta: no tengo idea qué exactamente (pero es algo relacionado con física, informática y esas cosas). Cagón: se te echará mucho de menos, tu forma de ser (muy lamentablemente) escasea estos días, pero eso te hace único y apreciable. Tu honestidad es grande, al igual que tu tenacidad, así que estoy seguro de un par de cosas: que por lo mismo te irá la raja donde sea; y que (en parte por lo mismo, ya que podrás pagarte el pasaje a Chile) nos volveremos a ver. ¡Un abrazo gigante y todo el éxito del mundo tanto para ti como para tu familia!

PD: Esa foto es notable. Claramente no es la mejor de Anderson, pero es la foto oficial de todos los homenajes, y ¿quién soy yo para romper las tradiciones?

domingo, 24 de febrero de 2008

Vacaciones 2008: La ida, segunda parte y final.

Anteriormente, en el blog sin nombre...

Fui invitado de vacaciones a Tongoy, y muchas cosas salieron mal: tomé el bus equivocado que me dejaría apenas a mitad de camino, todo por confiado y porque después nadie me dijo que estaba mal. Entonces ahí estaba, estancado en Los Vilos y esperando el bus de la salvación que me llevara a mi destino.

Mi quemado de camionero se desarrolló más temprano de lo esperado, ya que las horas pasaban y ningún bus útil pasaba. Pasaron muchos buses hacia Salamanca, un lugar que apenas había escuchado. No tenía idea que tanta gente necesitaba trasladarse a dicha localidad, quizás qué hay allá de bueno, espero saberlo algún día. Así pasaban los minutos y la gente se rotaba, es decir, unos se iban y otros llegaban, dejando al grupo en una cantidad cercana a las 10 personas. En un momento llegó una madre con su hija (eso parecía) y ese encuentro fue bastante especial. La señora estaba un poco molesta de tener que haber llegado ahí, mientras su hija (eso parecía) permanecía en silencio. No recuerdo dónde tenían que ir, pero debían tomar otro bus, tal como este servidor. La señora hace una llamada telefónica que me marcará de por vida (al igual que a los otros 8 que estábamos allí). Asumo que estaba hablando con su marido, a quien le dice algo así como: "hola, sabes que estoy aca en Los Vilos y resulta que tengo que tomar un bus para (insertar acá el destino)..." Sonaba alterada, pero no más de lo normal. Hasta ese momento. Inmediatamente después de eso cambia el tono de voz a uno patológicamente molesto: "¡¡¿¿Y TÚ CREÍ QUE YO TENGO MUCHA PLATA WEON??!! AH, CLARO... TENGO QUE LLEGAR A (insertar nuevamente el destino) Y ESTOY ACÁ EN LOS VILOS!!!!..." Cada uno de nosotros se trató de hacer el leso, mientras la pobre niña observaba en silencio. Y como si lo anterior hubiese sido poco, ahora viene un nuevo giro en la conversación. La señora adopta un tono calmado en un nanosegundo y cambia el tema "Ya... y lo otro que te iba a decir era..." ¡¡¡Y LE HABLÓ DE OTRA COSA NADA QUE VER!!! Creo que era algo de ir al supermercado o algo así. Luego (para rematarla), volvió a su tono patológico y volvió a putear al pobre, tratándolo de aweonao, entre otras cosas. Realmente la llamada era asombrosa.

En fin. Después de eso no pasó mucho rato (ya era tarde en todo caso, el sol ya se estaba poniendo) hasta que por fin apareció el bus que me llevaría al norte, con destino final (UUUU) La Serena. La compañía era Tur-Bus, la que me dijeron desde un comienzo que tomara, y que ahora me llegaba a salvar. Paso mi bolso y me subo muy rápidamente, tanto que hasta dudé si le pasé el bolso a la persona indicada. Una vez arriba del bus, sentadito y contento, contesto una nueva llamada de mi tío, le digo inmediatamente que estoy arriba del bus, y él me da nuevas indicaciones para llegar donde tenía que llegar. Cuelgo e inmediatamente llamo a mi casa para avisar que estaba bien. La nueva travesía consistía entonces en bajarme en Coquimbo y tomar un colectivo para Tongoy. "Perfecto", decía yo, "en unas cuantas horas esto se habrá acabado." Pasaban los minutos y apareció el auxiliar del bus. Me pregunto dónde iba, y le conté mi historia. Me dijo que me bajara en el hospital de Coquimbo, y que allí buscara colectivos para llegar donde me dirigía. Me cobró $4000, que sumados a los $5000 que me cobró Aristóteles (el primer sabio de Pullman Bus), hacían interesante el viaje desde el punto de vista económico. Por lo menos hasta ese momento.

Luego de haber arreglado todo eso, una pelicula comenzó a mostrarse en el bus, que a pesar de estar escuchando música y tratando efectivamente de no verla, terminé viéndola igual. Se llamaba Redline (gracias imdb.com) y era bien malita. Buscaba meter romance y una insulsa historia familiar en el mundo de las carreras y de apuestas de millones de dólares (a la Fast & Furious) de una manera un poco forzada. En la hora y pico (chan) que duraba la película me dieron un brownie para comer, me sirvieron un vaso de té (con mucha azúcar) y claro, mi tío volvio a llamar un par de veces. Francamente, yo no encontraba qué decirle luego de haberle dejado claro que estaba arriba de un bus y que eventualmente llegaría a alguna parte, pero que necesitaba tiempo para aquello: "¿Dónde estay?"..."No cacho bien, creo que pasamos una ciudad que no es Coquimbo (porque he estado ahi y podria cachar que es (en serio, podría)) y bueno, el auxiliar me dijo que me bajaría en esa ciudad así que no creo que lo haya olvidado (entre otras cosas, porque lo anotó)" "Ya... fijate bien"... "..." "Oye, no te pongai nervioso" "No tío, si no estoy--"..."Y cuídate, ya chao."

Más tarde, una vez saciadas tanto mi hambre como mis ganas de ver una pelicula deficiente, me dediqué a mirar el cielo nortino mientras escuchaba a Josh Radin en mi mp4, mi fiel acompañante. En ciertos momentos esperaba caer bajo un sueño que me dejara descansar unos minutos de la tontera que estaba pasando y de la difícil posición en la que coloqué a un par de miembros de mi familia... pero al final no dormí (capaz que me hubiese pasado...). Miraba el precioso cielo estrellado de alguna parte entre Tongoy y Los Vilos (tecnicamente esto es correcto) y sólo podía esperar llegar luego. De repente, veo que pasamos un desvío que decia Tongoy, y pensé de inmediato en lo que me esperaba: llegar a Coquimbo y devolverme, para finalmente (¡¡¡AHORA SÍ!!!) llegar. Una nueva llamada de mi tío me obligó a contar lo mismo que acabo de decir.

Entonces más tarde llegué a Coquimbo, donde me dejaron en la parte alta de la ciudad, un lugar con casas relativamente nuevas y bien mononas. El auxiliar me aseguró que pasaría algo y me llevaría a alguna otra parte, para así poder llegar donde, a estas alturas, ya se hacía necesario llegar. Evidentemente, la llamada de mi tío no se hizo esperar. A todo esto, si bien he bromeado bastante con el hecho de recibir innumerables llamadas de mi tío, debo decir también (y esto seriamente) que si no hubiese sido por algunas de esas oportunas llamadas, no habría llegado de la manera que lo hice a Tongoy, sano y salvo. Esta llamada en particular fue de gran ayuda, ya que hizo que me moviera de allí y buscara un taxi que me llevara al centro, porque de los 3 minutos que estuve parado en ese paradero, nada que me sirviera pasó. Así que me moví, pero lentamente. Luego de preguntar en una Copec donde diantres estaba el terminal de buses, crucé la calle y me detuve en una parada de taxis. Un joven tocaba guitarra y se veía tan solo y aventurado como yo (el más aventurado po), así que decidí tomar un descanso y escucharlo inventar cualquier cosa. No era el mejor guitarrista de la vida, y hasta me dieron ganas de quitarle su instrumento (la guitarra) y dar jugo, pero en ese momento volví a la realidad: debía moverme.

No sé por qué dejé pasar un número indeterminado de taxis hasta que finalmente levanté la mano. Me paró un taxi que atrás iba lleno, pero que adelante tenía espacio para mí, mi mochila y mi bolso. 'Al terminal de buses', exclamé. Recibí una respuesta afirmativa (cuaquier cosa era mejor que 'voy completo') y me subí. Despues de algunas cuadras recorridas (no muchas, si el camino no fue mucho) el taxista pregunta '¿de vacaciones, Cumpa?' a lo que yo respondo que claro. Le conté parte de mi historia (obviando lo necesario para no quedar como un verdadero idiota) y el caballero ayudó aun más a mi tranquilidad al decirme que era altamente probable que hubiese algun colectivo que me llevara a Tongoy. Llegamos al rodoviario de Coquimbo y bueno, me bajé, pagué los 600 pesos de la carrera y el amigo siguió su camino con los que creo eran turistas peruanos. Lo poco que hablaron fue en un acento parecido y se veían como que los estaba llevando en una especie de viaje largo. Tenía que pararle el dedo justo a ese taxi, ¿cierto?

En el terminal habían unos cuantos buses a punto de iniciar los últimos viajes de la noche. Era más de la medianoche y los viajes se acababan por el momento (iba a decir 'por el día', pero el nuevo día acababa de comenzar). Así fuimos quedando pocas personas, todas agrupadas cerca de los taxis. Veia que llegaba uno y en vez de salir con gente, se bajaban a hacer algo. Pasaron como 10 minutos, y hable con mi tío nuevamente. Él se estaba moviendo para hablar con un familiar que vivía en la ciudad para ver la posibilidad de alojarme en su casa. No hubo éxito. Así pasaron los minutos y cuando llegó un nuevo taxi, decidí hacer algo. El siguiente taxi traía al conductor víctima de mis intentos por llegar a Tongoy. El conductor era muy parecido a James Caan (Sonny de El Padrino; el encargado del casino Montecito en la (recién cancelada) serie Las Vegas (esto hasta la temporada anterior, porque el caballero renunció)). Motivado le pregunté si existía la posibilidad que me fueran a dejar a Tongoy. James me dio todas las esperanzas del mundo mientras me decía que por supuesto que sí, que sólo tenia que esperar a lo más una media hora, pero que no existía ningún problema en el mundo. Poco antes le había hablado a una niña sólo para hablar con ella (por si las probabilidades se mostraban indulgentes conmigo, casi como cuando me da por jugar Loto) y ella se había encargado de echarme el avión abajo: 'Quiero llegar a Tongoy', 'Bien difícil lo veo...' Me hubiese visto después que el señor Caan me dejó arriba: quería sacarle la lengua a la joven, pero no la volví a ver. Ella quería ir a la parte alta... si supiera que no hay nada que tomar para la vuelta. James me hizo sentir como en casa, me dijo que esperara en la central y me llevó consigo. Me dijo que él mismo no me podría ir a dejar, ya que estaba esperando a una señora que llegaba como a las 1:30 o algo así (quizas era más tarde, tipín 2) a quien le tenía las llaves de su casa. La famosa central era un local del mismo terminal. Me dijeron que entrara y que viera la tele por mientras. El encargado de la central veia Morandé con Compañía, así que mostré mi inmediato interés en ver la caja idiota. Afortunadamente, muy poco (de hecho, sorprendentemente poco) más tarde llega un caballero pelado (sin ofender, ya me va a tocar a mí) y el señor Caan le advierte sobre mi presencia: yo estaba primero que unas cuantas ordenes locales.

Así que partimos. ¿Se acuerdan que dije que el viaje estaba saliendo económicamente conveniente hasta el momento? Bueno, caminamos al auto mientras explico mi situación, y cuando estoy echando mi bolso en el portamaletas, escucho el notición económico que me traspaso el corazón: '¿Y cuánto sale la carrera?'...'DIECIOCHO'. No daba para pensar otra cosa (a menos que al caballero le gustara expresar sus cifras en centenas, algo un poco improbable). Tragué saliva y le di pa delante nomás. No me iba a echar para atrás tan cerca de mi destino. Afortunadamente andaba con esa plata y bueno, le tuve que decir adiós. Arriba del taxi, me explayé de mejor manera en mi historia, poniendo estricto énfasis en que era una víctima de gente que me arrastró en su manto de ignorancia... todo para pedirle una rebaja. En un momento intenté pedirle una, pero fue infructuoso: el asalto estaba llevándose a cabo. Cambié el tema y conversamos un poco de ambos, para hacerlo sentirse cercano a mí... y pedirle una rebaja. Pero no resultó. Una media hora después, y luego de haberme comunicado con la persona que se mandó el error geográfico (a quien le exigí una indemnización por aquello, error que me costó 18 lucas más) así como también con mi tío, llegamos a Tongoy.

Una vez allí, la nueva problemática surgió para llegar donde tenía que ir, un conjunto de cabañas. Preguntamos en los carabineros y uno se hizo el leso y adujo que llevaba poco tiempo ahí o algo así, mientras el otro comenzó a explicarnos. Digo que el primero se hizo el leso porque luego se puso a ayudar en las indicaciones que nos daba el segundo paco. No nos sirvieron mucho las indicaciones, asi que me comuniqué con mi tío, esperando mejores. Me anduve equivocando: 'Tiene que subir el cerro y doblar para acá', 'Pero tío, no lo veo, dígame hacia dónde debemos doblar.' El taxista se involucró: 'A ver, pásame con tu tío...', 'Mire, tome la calle Urmeneta y siga derecho para acá', 'Pero caballero, para usted es fácil decir eso, deme buenas indicaciones'... La cosa es que luego de unos minutos dando vueltas por el cerro, nos ubicamos. Una vez me bajé y saqué mi maleta del auto, pensé en volver a regatear, pero lo deseché de inmediato: ya daba lo mismo. Así, saqué mi dinero, un poco triste de no volverlo a ver, y se lo entregué al caballero, quien me dio un apretón de manos y me deseó lo mejor. Habia llegado a mi destino: Tongoy.

PD: Este capítulo se lo dedico a mi amigo momo, quien sufrió un accidente que asustó a mucha gente (incluyéndome), ya que quedó bastante molido e incluso existía la posibilidad que le amputaran una pierna. Menos mal que se fue del Sótero del Río y donde está ahora está casi como rey, se ha recuperado rápido y su pierna está bien. A mi moreteado socio, va esto con cariño. También un saludo a cagón, uno de mis más fieles lectores, quien se va de Chile el 4 de marzo para SIEMPRE. Buena suerte.

lunes, 11 de febrero de 2008

Vacaciones 2008: La ida, primera parte.

Hola a todos. Sorprende el hecho de dedicar un tema a las vacaciones, dado que en realidad siempre me quejo de lo poco que salgo (lo que sigue siendo cierto) y que en realidad la primera palabra del título debería comenzar con una C. Sin embargo, la semana recién pasada tuve la suerte que me invitaran a Tongoy por unos días, cosa que sin duda aproveché, y ahora tengo un par de cositas para contar. Dividiré mi próximo relato en varias partes, probablemente tres o cuatro, y la ida constará de dos partes, porque en realidad este momento puede ser considerado como un capítulo en sí mismo, lleno de estupidez, risas, suspenso y más estupidez. Allá vamos.

Corría el domingo 3 de febrero de 2008. Yo trabajaba en lo que tenía que hacer, cuando de repente me llegó un mensaje de texto de mi primo. Estaba invitado a Tongoy, donde estaban unos tíos míos y sus hijos, y otra prima. Respondí de inmediato que sí ya que era la única oportunidad de salir que tendría, supuestamente febrero será un mes donde haré muchas cosas, pero de nuevo, es mi familia la que me dijo eso, así que hay que tomárselo con mesura. De todos modos ya encontré formas de no aburrirme en casa. Al otro día entonces me aventuré: salí de mi casa con el bolso en la espalda y mi mochila en la guata (donde llevaba un par de lecturas y mi cuaderno regalón, el de los Detroit Pistons (campeones de la conferencia del este este año, ya verán), ya que debía arreglar algunas cosas en el trabajo que estoy haciendo), dispuesto a irme a la cuarta región y pasarlo bien.

Estación Metro Tobalaba. Llamo a Tongoy para informar sobre la hora, disponibilidad de pasajes que internet me proveyó y que me iba yendo (oj). Me bajo en Estación Central y como es costumbre, me perdí. Pero nada que diez minutos caminando no arreglen. "Finalmente" llego al Terminal Alameda (donde me dijeron que fuera), pregunto en Tur-Bus y no hay pasajes. Me voy a Pullman Bus y me dicen que vaya al terminal San Borja (mi destino desde el primer momento). Así que vuelvo a la Estación Central y camino todo lo que hay que caminar para dentro del Paseo Estación para llegar allá. No conocía dicho terminal, y debo decir que es gigante (mejor dicho, será gigante) y me gustó mucho, porque creo que quedará re weno. Sin embargo (y desviándome un poco del tema) me asombra la estupidez de colocar el terminal de buses más grande de Latinoamérica (según ellos) en el centro, donde te demoras como 15 minutos más tanto salir como entrar de Santiago, además de contaminar de todas las maneras posibles. Pero en fin... líos con platas, mejor no meterse. Volviendo a mi historia, llego al San Borja, y en Pullman Bus tampoco tenían pasajes, hasta el otro día. Ojo con lo que sigue. Entonces le pedí para el 5. Le dije que me viera para Tongoy, y no había nada. Entonces le dije que me diera uno para Los Vilos. El connoisseur de la empresa entonces me preguntó si me servía, y yo le dije que sí, porque como se me dijo, Tongoy estaba antes que Los Vilos. Al no haber refutación, el pasaje fue vendido y la transacción fue hecha. Me devolví a mi casa tranquilo, ya que, si bien no me había ido ese día, me iría al otro día (uf).

Al otro día ocurrió lo mismo: el hombre equeco tomó sus cosas y partió, tranquilo, al terminal San Borja. El bus saldría a las 3 de la tarde. Llegué casi 20 minutos antes y me senté a esperar. Mientras esperaba me compré una coca-cola de medio litro (las recomiendo ya que salen heladísimas de la máquina, cosa que me encanta) y obviamente, me saqué las cosas de la espalda. En la espera vi una máquina de Tur-Bus que decía Tongoy, en ese momento pensé que probablemente debí de haber comprado boleto en ese bus. Pero permanecí imperturbable ya que me iría pronto (...). Y dieron las 3 y el bus no apareció. Se acabó la bebida, se fue el Tur-Bus y bueno, sólo cabía seguir esperando. La gente a mi lado también esperaba ese bus, así que permanecí en calma. Finalmente llegó el famoso bus y, como es debido, nos subimos. Al momento de pasar las maletas se me preguntó a dónde iba, y yo dije confiado "Tongoy". El segundo connoiseur me dijo algo como "entonces te dejamos en el cruce" y metió mi maleta dentro de la máquina. Salimos del terminal como a las 3:40 con destino a Los Vilos, y yo, obviamente, me iba a bajar antes, en el famoso cruce.

Ahora llegó el momento de hacer la pausa que algunos estaban esperando. Felicitaciones a quienes se dieron cuenta (excepto mi prima, a menos que lo haya sabido) del horroroso fallo geográfico que cometí tanto yo como el vendedor de Pullman Bus, así como también el encargado de las maletas del bus que tomé. Resulta que Los Vilos queda mucho más al sur que Tongoy, de hecho, es la comuna más al sur en la IV región, mientras que Tongoy queda bastante más arriba, en el tercio superior de la región (si se quiere), en la región de Coquimbo. ¿Por qué cometí tal error? Por confiado. Dos personas, cuyas identidades no revelaré, me dijeron con absoluta confianza que Tongoy estaba antes de Los Vilos. Yo creí de inmediato cuando la recomendación vino de una persona que va continuadas veces a esta última localidad. De todos modos, asumo parte de la culpa al no ser incrédulo, ya que nunca busqué en ningún mapa (y además, absolutamente nadie me dijo lo contrario) si esto era cierto. Así no más son las cosas.

Entonces estaba yo metido en ese bus que me dejaría casi a mitad de camino. Yo leía un texto sobre el ordenamiento partidario chileno en el siglo pasado y escuchaba música, tranquilo y enfocado en arreglar lo que me habían pedido del trabajo, cuando poco a poco me voy dando cuenta de mi error. Iba más de una hora de viaje cuando por alguna razón me di cuenta de un probable error en mi geografía. Más tarde hablé con el sabio asistente del bus (asombrado por su sabiduría me dieron ganas de conocerlo mejor) y asesorado por el conductor (quien era el único que sabía lo que estaba haciendo (menos mal)) me dijeron lo que siempre fue lo cierto: Tongoy está después (muy después) de Los Vilos. Tranquilo, como he estado todo este tiempo, recibí la noticia, que ya había sido preparada por mi hermana, quien me llamó luego que yo le mandé un mensaje de texto con la posibilidad de un error en los cálculos.

Llegamos a Los Vilos sin novedad, excepto del hecho que no sabía qué diantres hacer en una comuna que pisaba por primera vez en mi vida, y solo. Le pregunté al amigo qué podía hacer ahora, y demostró no ser tan terriblemente estúpido: me dijo que viera si habían pasajes en el terminal (wow, pero ahora viene lo realmente importante) y que si no me dirigiera a la Shell que estaba a la entrada de la ciudad, donde había la posibilidad que algún bus pasara y me llevara más cerca de mi destino final (uuuu). En el terminal pregunté (a un hombre muy parecido al niño que sale en la saga de Spy Kids, ese ruliento feo) y no habían pasajes hasta el otro día, con lo que me urgí un poco. Pero hice de tripas corazones y me animé a caminar en dirección a la Copec, ya que, de acuerdo a las indicaciones de Einstein, a la izquierda estaba la Shell. Con mi mp4 puesto caminé bajo el moderado calor de la cuarta región (que es lejos mejor que el de Santiago), dándome ánimo y diciéndome que todo saldría bien. Hasta Muse se puso con la causa: Follow through/make your dreams come true/don't give up the fight/you will be alright/'cause there's no one like you in the universe. Era imposible sentirse mal.

Así, caminando, llegué a la famosa Shell, luego de dudar un par de veces si es que había tomado el camino correcto. Una vez allí, crucé la calle y me uní a un grupo reducido de personas (digamos que eran 5). Rápidamente pregunté a una señora si estaba bien donde estaba: mi intención era tomar un bus que me llevara a Tongoy. "¿A dónde?", fue la respuesta. Repetí mi destino, y me dijeron que debía tomar un bus en dirección a La Serena, y bajarme antes (cuento repetido, pensé). La señora era bien simpática e incluso me ofreció la mitad de una empanada que se compró, la cual yo rechacé. Ella iba a, si no me equivoco, el sector llamado El Palmar, que no tengo idea donde queda (si es que existe).

Así pasaron los minutos. Mi tío llamaba constantemente (quizá demasiado), mientras pasaban buses para Illapel, Salamanca, Ovalle, pero ninguno hacia La Serena. La señora al parecer llevaba su mercadería para la casa, ya que iba muy cargada. De repente llegó un bus que decía Arica. De inmediato pensé "acá sí que estoy seguro, de más que Tongoy queda antes de Arica", y fui (luego que la señora arbitrariamente decidiera que las peticiones eran una ella y una yo (ella había partido con otro bus un rato atrás)). Me acerco al asistente y le digo "Caballero, ¿pasa por Tongoy?" Recibo como respuesta algo que no entendí y luego un "completo." Sólo atino a buscar confirmación: "¿sí, pasa?" Escucho con mucho esfuerzo un desinteresado "voy completo." Mis ganas de tomar un bus me tomaron el pelo y asumí que hacía alguna especie de recorrido completo, es decir, que pasaba por Tongoy y por todos los caminos del mundo en su ruta hacia Arica (en el momento sonaba mucho más lógico). Para volver a buscar confirmación (lo que prueba en parte cómo soy) pregunté nuevamente, y ahí el caballero se detuvo y me dijo "Amigo (por no decir "oye aweonao" (se lo agradezco)), ¡voy completo!" Ahí entendí a lo que se refería: el bus no tenía asientos. Obligados a seguir esperando. En cuanto a la señora, no pasó mucho tiempo hasta que afortunadamente encontró a un conocido en camioneta quien se llevó sus cosas, pero extrañamente no la llevó a ella, a pesar de tener una cabina trasera desocupada. Pocos minutos más tarde, un camión se detuvo y se la llevó. Se despidió de mí mientras yo seguía esperando, y además trabajaba en ese precioso quemado de camionero.

To be continued...

jueves, 31 de enero de 2008

Oda al fin de enero.

Adiós le digo a enero,
un mes decente
que después de empezar maoma
terminó como la gente.

Ganarme unos pesos,
ver series, pero también trabajar
así como salir con la gente que quiero,
fueron la tónica general.

Como este mes ya se va,
sólo me queda decirle hasta pronto
y abrirle las puertas a febrero,
del año el mes más corto.

Ojalá que cada uno
de los lectores de este blog
sepa disfrutar lo que les queda
si salen de la capital o no.

Que disfruten y descansen,
ojalá olvidando todo lo malo.
Que se bañen y se embarquen,
y disfruten a quienes tienen al lado.

Para así recibir a marzo
con las pilas bien puestas
y darle a dicho mes tan odiado
la mejor de las contiendas.

Cuídense mucho
y nos vemos por ahí
que la vida da muchas vueltas
y siempre ha sido así.