sábado, 28 de mayo de 2011

Un año más... ¿qué más da?

Lamento haber dejado a tanta gente colgando desde el tema anterior. Veo que mi equipo de basketball favorito y mi historia con ellos claramente interesó a muchos. Disculpen la demora, pero acá va el desenlace de la historia... Los Kings no se van! Después de mucho pensarlo (y de una sutil recomendación de la liga), los dueños decidieron quedarse un año más, mientras se trata de concretar una iniciativa para construir un nuevo y flamante estadio en alguno de los condados de la ciudad.


Honestamente, esta es una estadía muy condicionada, y los Maloof (apellido de los dueños) tienen el absoluto permiso de la liga (a través de su comisionado, David Stern) para irse de la ciudad una vez finalizada la siguiente temporada si los intentos de lograr construir el recinto fracasan. De esta forma, a pesar del interés gigantesco que ha habido por comprar localidades para todos los partidos en la temporada que viene, el equipo igualmente puede hacer sus maletas si no hay un plan para edificar un estadio en el corto plazo.

La casa de los Kings, el Arco Arena (ahora llamado Power Balance Pavilion) en una foto de 2006.

Este es un ejemplo de la importancia que tiene el tiempo y las oportunidades para cualquiera de nosotros. Para la gente de Sacramento, esto ha sido casi como renacer: uno de sus mejores negocios (el único equipo profesional que poseen) se ha quedado, por lo menos por doce meses más, y ha recogido todo el ímpetu para comenzar la nueva temporada con llenos de público para gran parte del itinerario de los 41 partidos que tienen de local. Si bien esa no es la solución para que se queden, el apoyo ayuda a aumentar la esperanza de un pueblo para unirse en la causa final.

Como ven, un año más no es irrelevante: un año más puede significar la diferencia entre una persona preparada y una novata; un año más significa tiempo para levantarse después de las caídas, sacudirse luego de las decepciones, intentar por segunda vez, o incluso para tratar de recuperar a alguna persona de nuestro pasado. En resumen, un año más significa oportunidades. Oportunidades de arrepentirse, de aprender, de empezar de nuevo, de buscar, de encontrar, etcétera, etcétera, etcétera.

El tiempo es lo más valioso, y tenemos que dejar de dar las cosas por sentadas. La gente de Sacramento lo sabe: ellos están conviviendo con un reloj en la mano, y si no se ponen de acuerdo, sus (y mis) queridos Kings se irán de verdad... y esta vez no van a volver.

Anexo: Top 10 con las mejores jugadas de la temporada de los Kings.